Lady Palmerstone, feliz de estar casada con un vizconde pese a sus ausencias, se preocupa por la falta de herederos. Su esposo, lord Palmerstone, idea un plan para evitar las molestias de engendrar, proponiendo que otro hombre lo haga. A pesar de su indignación inicial, Edyna acepta el acuerdo, encontrando en él una oportunidad de libertad. Gowan Maxwell, un hombre de vida dura, llega a la mansión como jardinero, sin sospechar que detrás del trabajo se esconden oscuras intenciones. La pasión surge entre Maxwell y Edyna, y ambos descubren un amor que no esperaban. Este amor los enfrentará a la realidad y a decisiones difíciles para estar juntos y no separarse jamás.