La diferencia que existe entre el amor y el desamor, guarda cierta semejanza con aquella que hay entre las olas que a diario van a romper sobre la orilla de una playa, y las que van a dar sobre las lineas accidentadas de la costa. Unas lo hacen de una manera, y otras de otra; y, si bien ambas son llamadas iguales entre sí, por más que queramos relacionarlas, en nada se asemejan. Las primeras parecian llegar al clímax a su encuentro con la arena para fecundar más vidas; mientras que, las secundas mencionadas, dan la impresión de acabar con la vida, aún cuando en el fondo la desean...